En los últimos años, ha habido un cambio fundamental hacia hábitos más sostenibles en todas las sociedades. Desde reciclar el plástico hasta utilizar más el transporte público, e incluso elegir marcas que utilicen materiales sostenibles. Todo esto es sólo la punta del iceberg. En última instancia, los consumidores y las empresas deben hacer más.
Empoderando a consumidores y empresas
Afortunadamente, la banca abierta ofrece una solución para que los servicios financieros impulsen un cambio positivo al ayudar a las personas y las empresas a ser más ecológicas.
El sector financiero maneja grandes cantidades de datos y esto es especialmente cierto en los bancos orientados al consumidor. Según la Autoridad Bancaria Europea, el año pasado se realizaron 101,600 millones de transacciones de débito, crédito y tarjetas en la zona del euro, lo que ofrece interesantes oportunidades de análisis.
Banca abierta sostenible
Brindar más claridad a través de los datos puede ayudar a las empresas y los consumidores a comprender mejor su impacto ambiental. Debemos reconocer que la sostenibilidad no es algo que se resuelva de la noche a la mañana, por tanto se debe crear una infraestructura adecuada que ayude a resolver este desafío.
Además de ayudar a las empresas y consumidores a comprender mejor la forma en que sus hábitos cotidianos impactan en el medio ambiente, la banca abierta también puede ayudar a las empresas de servicios financieros a cumplir con sus requisitos normativos de sostenibilidad.
La banca abierta es la respuesta a muchas de estas necesidades, pues al permitir que los bancos comprendan la huella de carbono de sus clientes individuales y comerciales, logra que éstos comprendan mejor la responsabilidad climática que está en sus manos.
Dado que los datos son una fuerza impulsora para desbloquear importantes beneficios ambientales, la banca abierta puede ser una fuerza empoderadora, ofreciendo una solución para que los bancos y las fintechs ofrezcan servicios que marquen la diferencia, mediante el uso de datos de transacciones de una manera significativa y procesable.
Al aprovechar la banca abierta, los bancos se están convirtiendo en agentes de cambio. Como tal, es probable que la colaboración entre industrias y las asociaciones poderosas continúen formándose entre los bancos y las fintech. Trabajar juntos les permitirá crear servicios que utilicen datos de transacciones para potenciar las decisiones diarias que reducen las emisiones de carbono. Este es un cambio de juego para la sostenibilidad.
Vía: International Banker